Home | Novidades Revistas Nossos Livros  Links Amigos

Entrevista a Alfonso López Quintás

(Madrid, 12-04-03, Cecilia Canalle y Sílvia Brandão)

 

P.:¿Es posible que un artista cree una auténtica obra de arte aun cuando él no acepte los valores fundamentales de la antropología?

ALQ - Creo que una obra de arte auténtica es la que expresa algo profundo de la realidad, sobre todo de la realidad humana, y nos ayuda a elevarnos en la vida, a transfigurar la existencia cotidiana. El arte o es transfiguración o no es arte. Para ello, el acontecimiento artístico debe implicar un encuentro, encuentro del ser humano con alguna realidad. Para que haya encuentro, debe haber por nuestra parte asunción activa de las posibilidades que nos ofrecen las realidades del entorno. Esas posibilidades tienen valor para nosotros, son "valores". Si negamos los valores, negamos el arte. Entonces, el arte puede ser una producción de obras, pero no creación de obras artísticas.

    

P.: Discutimos con nuestros estudiantes, universitarios brasileños, su estupendo artículo "La manipulación del hombre a través del lenguaje" y sus ideas les han causado profunda impresión. Pero a alguno se le ha ocurrido que la crítica se pudiera extender a todo y, entre bromas y veras, -decía este estudiante- a la misma denuncia de manipulación, hecha por usted...

ALQ - Alguna vez me sucedió también que algún asistente a conferencias mías sobre la manipulación del hombre a través del lenguaje me dijo que yo también estaba manipulando al público porque intentaba convencerles de que era verdad lo que yo opinaba. Le hice ver la diferencia que hay entre ser un guía -que orienta a los demás hacia el conocimiento de alguna realidad, hablando a su inteligencia y dejándole libertad de elección- y ser un manipulador -que quiere vencer sin convencer, sin dar razones adecuadas-. Le invité a que me dijera si yo había dado razones, había explicado bien los temas y había puesto las cartas boca arriba. Me dijo que sí. Entonces yo agregué que, si hago eso, no soy un manipulador, sino un guía, una persona que acerca a otras al área de irradiación de los valores; no los fuerza a aceptar tales valores, sino los acerca a su campo de influencia, para que sean los valores quienes las atraigan...

P.: Es frecuente que los profesores de las distintas asignaturas piensen que ocuparse de la formación integral del estudiante es una tarea que no les toca, que lo suyo es enseñar física o química etc.

ALQ - El problema de convertir a los profesores en verdaderos formadores de la personalidad de los alumnos lo trato en mi libro Cómo lograr una formación integral" (ya traducido al brasileño, pero no sé si ya publicado). Me baso en el concepto de relación, básico en todo el universo y sobre todo en la vida personal humana. Todas las áreas de conocimiento que destaquen la importancia de la relación en cualquier aspecto de la realidad o de la vida vegetal, animal o humana están contribuyendo, sin hablar directamente de valores y de formación, a la formación humana, ética, de los alumnos. La LOGSE propuso la meta de la formación de manera acertada pero no el modo de conseguirla Quiso hacerlo mediante el recurso de que tos profesores hablen en clase de ciertos valores y aprovechen algunos aspectos de su área de conocimiento para resaltar su importancia. Este método no es adecuado.

P.:  ¿Por qué hay por veces tan poca ilusión de parte de los profesores?

ALQ - Hoy se advierte una gran desmotivación en los profesores. No están bien pagados y tienen que dar muchas clases para sobrevivir. Por otra parte, piensan que no hay nada que hacer frente al poder de la manipulación de los medios de comunicación social. Además, ven que los métodos de enseñanza tradicionales no se muestran actualmente fecundos, pero ellos no tienen afán de asumir otros nuevos.

P.: ¿Cuál ha sido la experiencia más importante en su vida de profesor?

ALQ - La experiencia de ver que, al aplicar la metodología filosófica que había trabajado en mis primeras obras a cuestiones pedagógicas, lograba explicar muchos aspectos de la vida humana de forma satisfactoria para los jóvenes. Eso me animó a orientar mi investigación filosófica hacia temas formativos.

P.:  ¿Cómo se siente en estos sus cumpleaños tan singulares: 75 de vida y 50 de sacerdocio?

ALQ - El 50 aniversario de la ordenación sacerdotal lo celebré con suma alegría y agradecimiento, por muchas razones, entre ellas la de verme rodeado de quienes colaboran conmigo al bien de los jóvenes.

P.:  ¿Como ve la difusión de su pensamiento por el mundo?

ALQ - No se difunde tan rápidamente como yo quisiera, pero sí lo está haciendo en una medida que yo en buena medida desconozco. De cuando en cuando recibo noticias de un lugar u otro, diciéndome que tal libro le ha hecho bien a una persona o a una institución, y eso me anima mucho. Actualmente, está siendo introducida la Escuela de Pensamiento y Creatividad en diversos centros, incluso universitarios. El 24 de marzo inauguramos en la universidad Anáhuac, de México D. F., una "Cátedra de creatividad y valores Alfonso López Quintás", que se dedicará a difundir el pensamiento de la Escuela de Pensamiento y Creatividad en todo México. En septiembre comenzarán a impartirse cursos en la universidad UCIC de Puebla, México, y se están gestionando cursos en la universidad UPAEP, de Puebla. En España se dan cursos de la Escuela en la universidad CEU, Madrid, y próximamente en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense, Madrid. Por otra parte, estoy ofreciendo cursos y conferencias en Internet, sobre todo en el portal Catholic.net. En breve, contará la Escuela con una página WEB viva, en la que se dé cuenta de la marcha de las investigaciones y de la difusión, y sirva de punto de unión entre todos cuantos mantienen alguna relación con este proyecto formativo.

P.:  ¿Qué planes hace para el futuro?

ALQ - Los planes para el futuro consisten en ampliar la investigación y asentar la Escuela, formando a monitores nuevos e introduciéndola en centros académicos que la tomen como algo propio.